
Los dioses callan como castigo por transgredir sus ordenes. Cierran sus ojos y quitan el resplandumo, velo de las almas.... Nos dejan en la miseria impuesta por los hombres, locos corruptos, perversos, y obsesivamente celosos....
La historia que les voy a contar, no se contó en leyendas. Se cuenta ahora que escribo estas líneas. Ocurrió en un lugar donde la muerte fue encerrada, y al liberarse se expandió devorándolo todo. Combatientes sobrevivientes se levantaron mirándose unos a otros envueltos en sangre. Alrededor estaban todos los caídos inertes. Los guerreros enfrentaron lo funesto, a pesar de que el peso de su mal los aplastaría. Los dioses desde el núcleo del cielo, enviaron su orden de altocienso, en una ecuación de triunfo para resolver….